miércoles, 15 de junio de 2011

Ancestros y las Diferentes Inteligencias

Según los ancestros de diferentes partes de nuestro mundo, nuestro cuerpo es
sintiente y pensante. Por ejemplo, en el caso de los ancestros de las tribus
australianas, cuando una persona se hiere o enferma, la tribu se reúne a su
alrededor junto con el enfermo y le canta pidiéndole perdón a la herida o
parte afectada. Y esta entra, automáticamente, en remisión y se dan
curaciones milagrosas.

Lo mismo ocurre en las asombrosas curaciones de los kahunas o médicos magos
hawaianos, estos entran en oración directa con la parte afectada pidiéndole
perdón …en un acto de oración donde se involucran ellos, el paciente y todas
las vidas durante las cuales ellos se han encontrado e involucrado con esa
persona….y se dan curaciones consideradas milagrosas.

En el conocimiento ancestral Inka, todo es reciprocidad. Uno enferma cuando
se llena de energía pesada o “hucha”, por tener actitudes egoístas y no
dejar fluir el “sami” o energía ligera. Por ello, en las curaciones se pide
a la parte del cuerpo que se armonice con la pachamama y permita que el
bloqueo de se equilibre. Y la persona sana.

En el caso de los Lakotas, en el norte, al cuerpo se le habla para
informarle que una medicina va a curarlo, y a la medicina también. Y,
lógicamente, las personas sanan.

Como vemos, tomando algunos casos de medicina ancestral, llegamos a una
interesante conclusión: Los ancestros aceptaban a las partes de nuestro
cuerpo como un ser completamente inteligente y autónomo del cerebro… eso,
durante los últimos siglos, se tomó como franca superchería o superstición…
pero veamos ahora los descubrimientos más recientes de la ciencia… te vas a
quedar estupefacto.

La sabiduría del cuerpo es un buen punto de acceso a las dimensiones ocultas
de la vida: es totalmente invisible, pero innegable. Los investigadores
médicos empezaron a aceptar este hecho a mediados de los años ochenta.
Anteriormente se consideraba que la capacidad de la inteligencia era
exclusiva del cerebro, pero entonces se descubrieron indicios de
inteligencia en el sistema inmune y luego en el digestivo.

LA INTELIGENCIA DEL SISTEMA INMUNE

La Dra. Bert descubrió (y luego lo confirmaron otros científicos), que
existen tipos receptores inteligentes no sólo en las células cerebrales,
sino en todas las células de todas partes del cuerpo (les llamaron en un
principio neuropéptidos).

Cuando comenzaron a observar las células del sistema inmunológico, por ejemplo, las que protegen contra el cáncer, las infecciones, etc., encontraron receptores de los mismos tipos que en el
cerebro. En otras palabras, tus células inmunológicas, las que te protegen
del cáncer y de las infecciones, están literalmente vigilando cada
pensamiento tuyo, cada emoción, cada concepto que emites, cada deseo que
tienes. Cada pequeña célula T y B del sistema inmunológico, produce las
mismas sustancias químicas que produce el cerebro cuando piensa. Esto lo
hace todo muy interesante, porque ahora podemos decir que las células
inmunológicas son pensantes. No son tan elaboradas, como lo es la célula
cerebral que puede hacerlo en inglés o castellano, pero sí piensa, siente,
se emociona y desea, se alegra, se entristece, etc. Y ello es la causa de
enfermedades, de stress, cáncer...etc.…cuando te deprimes entran en huelga y
dejan pasar los virus que se instala en tu cuerpo.

LA INTELIGENCIA DEL SISTEMA DIGESTIVO

Hace diez años parecía absurdo hablar de inteligencia en los intestinos. Se
sabía que el revestimiento del tracto digestivo posee miles de terminaciones
nerviosas, pero se les consideraba simples extensiones del sistema nervioso,
un medio para mantener la insulsa tarea de extraer sustancias nutritivas del
alimento. Hoy sabemos que, después de todo, los intestinos no son tan
insulsos. Estas células nerviosas que se extienden por el tracto digestivo
forman un fino sistema que reacciona a sucesos externos: un comentario
perturbador en el trabajo, un peligro inminente, la muerte de un familiar.
Las reacciones del estómago son tan confiables como los pensamientos del
cerebro, e igualmente complicadas.

LA INTELIGENCIA DEL HÍGADO

Las células de colon, hígado y estómago también piensan, sólo que no con el
lenguaje verbal del cerebro. Lo que llamamos “reacción visceral” es apenas
un indicio de la compleja inteligencia de estos miles de millones de
células.

En una revolución médica radical, los científicos han accedido a una
dimensión oculta que nadie sospechaba: las células nos han superado en
inteligencia durante millones de años.

LA INTELIGENCIA DEL CORAZÓN

Muchos creen que la conciencia se origina únicamente en el cerebro.
Recientes investigaciones científicas sugieren, de hecho, que la conciencia
emerge del cerebro y del cuerpo actuando juntos. Una creciente evidencia
sugiere que el corazón juega un papel particularmente significante en este
proceso.

Mucho más que una simple bomba, como alguna vez se creyó, el corazón es
reconocido actualmente por los científicos como un sistema altamente
complejo, con su propio y funcional “cerebro”. O sea, el corazón tiene un
cerebro o inteligencia. Según nuevas investigaciones en el campo de la
Neurocardiología, el corazón es un órgano sensorial y un sofisticado centro
para recibir y procesar información.

El sistema nervioso dentro del corazón (o el “cerebro del corazón”) lo
habilita para aprender, recordar, y para realizar decisiones funcionales
independientemente de la corteza cerebral. Aparte de la extensa red de
comunicación nerviosa que conecta al corazón con el cerebro y con el resto
de cuerpo, el corazón transmite información al cerebro y al cuerpo
interactuando a través de un campo eléctrico.

El corazón genera el más poderoso y más extenso campo eléctrico del cuerpo.
Comparado con el producido por el cerebro, el componente eléctrico del campo
del corazón es algo así como 60 veces más grande en amplitud, y penetra a
cada célula del cuerpo. El componente magnético es aproximadamente 5000
veces más fuerte que el campo magnético del cerebro y puede ser detectado a
varios pies de distancia del cuerpo con magnetómetros sensibles.

RECOMENDACIONES:

Las investigaciones del Instituto HeartMath sugieren que “respirando con
Actitud” es una herramienta que le ayuda a sincronizar su corazón, mente y
cuerpo para darle una coherencia psicofisiológica más poderosa. Al usar esta
técnica regularmente -pruebe 5 veces al día- usted desarrollará la habilidad
para realizar un cambio de actitud durable. Con “Respirando con
Actitud”, usted se enfoca en su corazón y en el plexo solar mientras respira con una actitud
positiva. El corazón automáticamente armonizará la energía entre el corazón,
mente y cuerpo, incrementando la conciencia y la claridad.

La Técnica de Respirar con Actitud

1. Enfóquese en su corazón mientras inhala. Mientras exhala enfóquese en el
plexo solar. El plexo solar se encuentra unas 4 pulgadas debajo del corazón,
justo debajo del esternón donde los lados derecho e izquierdo de lacaja
toráxica se juntan.

2. Practique inhalar a través del corazón y exhalar a través de la caja
toráxica durante 30 segundos o más para ayudar a anclar su atención y su
energía ahí. Después, escoja alguna actitud o pensamiento positivo para
inhalar o exhalar durante esos 30 segundos o más. Por ejemplo, usted puede
inhalar una actitud de aprecio y exhalar una de atención

3. Seleccione actitudes para respirar que le ayuden a compensar las
emociones negativas y de desequilibrio de las situaciones por las que usted
esta atravesando. Respire profundamente con la intención de dirigirse hacia
el sentimiento de esa actitud. Por ejemplo, usted puede inhalar una actitud
de balance y exhalar una actitud de misericordia, o puede exhalar una
actitud de amor y exhalar una actitud de compasión

Practique diferentes combinaciones de actitudes que usted quiera
desarrollar. *Puede decir en voz alta Respiro Sinceridad, Respiro Coraje,
Respiro Tranquilidad, Respiro Gratitud o cualquier actitud o sentimiento que
usted quiere o necesite.* Incluso si usted no siente el cambio de actitud al
principio, haciendo un esfuerzo genuino para cambiar, al menos le ayudará a
alcanzar un estado neutral. En el cual, usted tendrá más objetividad y
ahorrará energía




No hay comentarios:

Publicar un comentario